¿Dónde quedan los hombres?

En las consultas de reproducción asistida, habitualmente, se establece un vínculo íntimo con las parejas que llevan años batallando en silencio la gestión de sus sentimientos. 

La carga emocional de las parejas que consultan por esterilidad, sea cual sea el motivo de la misma, es muy intensa. Deben luchar contra una sociedad que no contempla la dificultad reproductiva como una opción y que, en más que menos ocasiones, sobrepasa la intimidad de las relaciones en las temidas preguntas sobre cuando decidirán tener hijos. 

En esta vorágine emocional, los hombres en muchas ocasiones se sienten apartados. Si bien es cierto que la sociedad carga el peso de la maternidad y crianza a las mujeres, no podemos olvidar que los hombres se sienten 100% implicados en su deseo de formar una familia. Así que no debemos menospreciar su malestar cuando esto no es posible. 

La invisibilidad masculina

Durante las visitas médicas, solemos centrarnos en la mujer al valorar la mayor parte de pruebas y dar las explicaciones sobre los futuros tratamientos. 

En más de una ocasión, algún paciente masculino me ha agradecido que me dirija a él durante la charla, ya que habitualmente se sienten marginados o incluso excluidos de los procesos. 

Muchos hombres pueden tener sensación de soledad y aislamiento durante todo el tratamiento de reproducción. Es crucial que reciban el mismo apoyo que sus parejas durante este camino. 

El estigma social

Muchos hombres no se sienten capaces de hablar de sus dificultades al demostrar una vulnerabilidad que socialmente todavía no está aceptada en todos los entornos. 

Hay hombres que tienen sentimientos de vergüenza y fracaso ante tales adversidades, dificultándose así la búsqueda de tan necesario apoyo. 

Rompiendo el silencio

Cada vez más hombres son capaces de reclamar su atención junto a la de su pareja, pero aún es necesaria mucha más educación y sensibilización para luchar contra los estigmas. 

Es necesario promover una comunicación abierta en la consulta, pero también a nivel social, para poder hablar de las implicaciones de la infertilidad masculina. 

Aportando el apoyo adecuado a todos los implicados, podremos garantizar que ambos miembros de la pareja reciban el respeto y atención que merecen en este arduo camino hacia la paternidad.